VALERO

Estos días, mi tiempo en solitario (todo el tiempo, no sólo el “libre”) se ocupa, a partes casi iguales, en 4 actividades:

- videos musicales y asuntos relacionados (verlos, comentarlos, cambiar de canal en busca del vídeo que quiero ver, ponerme nerviosa cuando hacen tops y no estoy de acuerdo con el orden, escuchar música, grabar cd´s, fantasear con cuando sea dj y pueda poner la música que a mí me da la gana en todas las fiestas, bailar mientras hago playback por toda la casa…)

- byron…dormir con él, hacerle mimos, hacerle fotos, jugar con él, hablar con y de él, pensar en él, darle besos a mi móvil porque él es el fondo de pantalla…

- Alfon, pensar en él, hablar con y de él, leer sus posts y comentarlos, mandarle mensajes y echarle de menos.

- Ser una Valero y reflexionar sobre qué es y qué no es ser una Valero.

Por ello…he decidido exponer mi teoría.

Ante todo es importante aclarar que Valero, para el que no lo sepa es mi primer apellido, y el de Alfons, en definitiva, el primer apellido de nuestros padres y el primer apellido de nuestro abuelo…y ahí empieza el problema.

Ser Valero es una actitud, un argumento vital, un guión…que para nada se puede decir que hayamos heredado de nuestro abuelo…pero sí de nuestros padres…que son clavaditos a su madre… es decir, a nuestra abuela, que se apellidaba Parada…por lo que he aquí la primera sorpresa ¿fascinante, verdad? Ser Valero, en realidad, es ser Parada. Anyway, el concepto es el concepto, Valero es el nombre del concepto, y así se va a quedar.

Es importante aclarar que no todo el mundo que se apellida Valero, es un Valero. En terminología transaccional, una persona apellidada Valero tiene otra posibilidad, ser un contra-Valero!

Esta ligera acomodación de la verdad (concepto-nombre del concepto) ya nos da algunas pistas sobre un aspecto importante de esta actitud: un Valero hace siempre lo que le da la gana (ya que tiene totalmente narcisizada una imagen de ser independiente y libre) pero eso sí…nadie dijo que esto fuera aplicable a todos los seres que pueblan la tierra.

Un Valero es un justiciero (es el cuasisinónimo más amable que he encontrado de “manipulador”). Siempre sabe lo que todo el mundo debería hacer en cada momento, y casualmente, como nadie más que él o ella se ha dado cuenta de que las cosas no marchan como deberían…no le queda más remedio que actuar…por qué somos tan injustamente tratados cuando intentamos hacer feliz a nuestra manera al resto del planeta?

Un Valero tiene verdadera y manifiesta alegría de vivir. Incluso cuando las cosas van mal…mirad en su interior…sólo hay que apretar la teclita apropiada (es decir, conseguid que alguna parte de su micromundo sea cómo a él/ella le gusta..) y ahí está de nuevo…dispuesto a salvar el planeta.

Un Valero es un ser incomprendido, me explico. Un Valero jamás lo reconocerá, pero se sabe mejor. ¿mejor que qué? Ah! Esa es una gran pregunta. Un Valero no es gilipollas, sabe perfectamente que su funcionamiento biopsicosocial es más o menos como el de todos los demás…pero es que se siente mejor…aunque no lo sepa explicar, estas cosas se sienten… Y entonces…por qué no se nota!!!!!! Por qué no he llegado a lo máximo en mi trabajo, por qué no me adora todo el mundo, por qué no soy inmortal? Totalmente incomprensible.

Un Valero necesita expandir su personalidad…esto se puede hacer de varias formas: escribiendo poemas en los que hablas de ti mismo, organizando homenajes en los que el tema, las películas y las conferencias las eliges tú, montando una fiesta en la que la música la pones tú, adoctrinando a cualquiera que se te ponga a tiro , haciendo un blog de ti mismo…

Un Valero lleva a un artista en su interior…a unos les ha dado por la guitarra, a otros por la poesía, a otros por el baile, a otros por los inventos imposibles, a otros por la decoración de interiores o la jardinería...

Un Valero es un seductor…un cachondo de moral relajada…y mucho más. Puede que algún Valero se eche las manos a la cabeza porque no se sienta en absoluto identificado…como ya comenté antes…se puede ser un contra-Valero, si uno se esfuerza muchísimo… Merecerá la pena?

En definitiva, un Valero es un ser contradictorio, duro por fuera, pero tierno y llorón por dentro, deseoso de querer a su manera y de que le quieran... Una vez alguien le dijo a una Valero “Eres mucho más humana de lo que tú te crees”, eh voilà, ésta es la única y auténtica verdad.